TSMC: La apuesta por los 2 nanómetros en Japón y el impulso imparable de la IA

Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC) continúa siendo el actor fundamental que capitaliza el auge global de la inteligencia artificial. Esta posición de privilegio se mantiene firme, incluso ante correcciones bursátiles recientes y ciertos desafíos operativos en su expansión japonesa. Mientras los inversores minoristas ven una oportunidad en la actual fase de debilidad, la dirección de la compañía evalúa decisiones estratégicas cruciales, centradas en una cuestión de coste y oportunidad: ¿Merece la pena acelerar la implantación de su tecnología de 2 nanómetros en Japón?

El sentimiento entre los analistas se mantiene claramente alcista. Según datos consolidados a 19 de diciembre, la recomendación de consenso para la acción de TSMC es "Comprar", respaldada por siete analistas. El precio objetivo promedio se sitúa en 355 dólares estadounidenses.

Algunas firmas han reiterado su confianza:
- Bernstein mantiene su calificación "Outperform" con un objetivo de 330 dólares.
- Barclays elevó su precio objetivo a 355 dólares, acompañado de una recomendación "Overweight".

Los expertos de Bernstein destacan, en particular, los planes de expansión de las capacidades de empaquetado de alta gama (Advanced Packaging). La tecnología CoWoS (Chip on Wafer on Substrate) está previsto que escale hasta aproximadamente 125,000 obleas mensuales para finales de 2026. Este incremento es vital para satisfacer la demanda masiva de gigantes de la IA como Nvidia.

Fundamentos operativos sólidos

Los últimos resultados financieros de TSMC respaldan este panorama optimista. En el tercer trimestre de 2025, la compañía reportó unos ingresos de 33,100 millones de dólares, lo que supone un incremento del 10.1% respecto al trimestre anterior. El margen bruto se mantuvo robusto en un 59.5%. El beneficio por acción alcanzó los 2.92 dólares, superando claramente las expectativas del mercado, que estaban en 2.59 dólares. En términos interanuales, los ingresos crecieron un notable 40.1%, impulsados principalmente por los chips para servidores de alta gama e inteligencia artificial.

Para el cuarto trimestre de 2025, la dirección prevé ingresos en un rango entre 32,200 y 33,400 millones de dólares, con márgenes brutos proyectados entre el 59.0% y el 61.0%. El foco sigue puesto en los nodos de fabricación más avanzados y rentables.

Una estrategia japonesa en revisión

En paralelo, la estrategia de expansión de TSMC en Japón está bajo escrutinio. Concretamente, se refiere a su segunda fábrica en Kumamoto. Informes de medios locales y de la firma de análisis TrendForce indican que la compañía está considerando cancelar la producción inicialmente planeada de 6nm para lanzarse directamente a la tecnología de 2nm.

El contexto económico justifica esta reevaluación. Su filial japonesa, JASM, registró una pérdida de 6,200 millones de dólares de Taiwán (aproximadamente 200 millones de dólares estadounidenses) en el primer semestre de 2025. En contraste, la fábrica en Arizona, con su producción en 4nm ya en marcha, generó un beneficio de 4,500 millones de dólares de Taiwán (unos 150 millones de dólares estadounidenses) en el mismo periodo. Además, los círculos industriales señalan una demanda débil de chips de 6nm, especialmente desde el sector automotriz. Un salto más rápido a los 2nm podría mejorar la utilización de la capacidad y la rentabilidad a largo plazo, aunque conlleva un coste significativamente mayor.

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La cuestión financiera y el papel de los subsidios

La dimensión financiera de este posible cambio de rumbo es considerable:
- Inversión original planificada para 6nm en Kumamoto: alrededor de 10,000 millones de dólares.
- Expansión directa hacia 2nm: más de 25,000 millones de dólares.

Este escenario hace que el apoyo gubernamental japonés sea un factor decisivo. Dado que gran parte de la producción probablemente estaría destinada a la exportación, y los compradores locales para chips de IA de última generación son actualmente limitados, los subsidios adicionales se convierten prácticamente en un requisito para que el salto a 2nm sea económicamente viable.

Los inversores aprovechan la corrección

La semana pasada, la acción de TSMC cotizada en Taiwán experimentó un retroceso, atribuido principalmente a la toma de beneficios en un entorno de volatilidad para los valores tecnológicos estadounidenses. Sin embargo, el número de accionistas aumentó notablemente: hasta el 19 de diciembre, alcanzó los 1.88 millones, el nivel más alto desde finales de abril y un aumento de casi 32,000 en una semana.

Llama la atención el fuerte interés de los inversores minoristas. El número de titulares de posiciones muy pequeñas (inferiores a 1,000 acciones) creció en aproximadamente 25,000, hasta rondar los 1.4 millones. Pero las posiciones más grandes también se incrementaron: en la categoría de 1,000 a 5,000 acciones se sumaron cerca de 5,900 inversores, e incluso el grupo de grandes accionistas con al menos 1 millón de acciones creció en 12, hasta un total de 1,541. A pesar de una reducción perceptible en la capitalización de mercado, los compradores predominaron sobre los vendedores.

Dominio de mercado e impulsores de la IA

TSMC controla, según estimaciones actuales, alrededor del 72% del mercado mundial de foundry (fabricación por contrato), consolidándose como el líder indiscutible. Su posición es especialmente fuerte en los nodos más avanzados, cruciales para los centros de datos de IA.

Los principales motores de crecimiento incluyen:
- Producción en nodos de 3 nanómetros.
- Tecnologías de empaquetado 3D como CoWoS para chips de IA y servidores de alto rendimiento.
- Introducción de la tecnología de 2 nanómetros a partir de 2026.

Esta posición sitúa a TSMC en el centro neurálgico de la cadena de suministro para la infraestructura de IA. La valoración actual de la compañía —un ratio precio-beneficio (P/E) de aproximadamente 29.7 y una capitalización bursátil de cerca de 1.5 billones de dólares— refleja la confianza de los inversores en su papel a largo plazo.

Perspectiva y próximos pasos

Pese al reciente retroceso en el precio, la acción muestra un rendimiento sólido en plazos más extensos: con una subida de algo más del 25% en los últimos doce meses y de casi un 27% desde comienzos de año. El mercado está reflejando tanto la volatilidad a corto plazo como la posición estructuralmente fuerte de la empresa dentro del ciclo de la inteligencia artificial.

El próximo hito importante será la publicación de los resultados del cuarto trimestre en enero de 2026. Este informe debería aclarar si TSMC mantiene el alto ritmo de crecimiento en su negocio de IA y cuán concretos son los planes para la fábrica de 2nm en Kumamoto. La gestión de las cuantiosas inversiones requeridas y la posible obtención de subsidios serán determinantes para la eficiencia con la que la compañía expanda su red global de fabricación.

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