IBM: La Unión Europea reconoce su papel clave en la estabilidad financiera

La semana pasada trajo dos noticias de gran calado para International Business Machines (IBM), que han centrado la atención de los inversores en la compañía tecnológica. Por un lado, un cambio positivo en la recomendación de un banco de inversión. Por otro, una decisión regulatoria europea que subraya la importancia sistémica de la empresa.

El pasado 5 de diciembre, las autoridades supervisoras financieras de la UE —la EBA, la EIOPA y la ESMA— tomaron una decisión trascendental. Bajo el marco del Acta de Resiliencia Operativa Digital (DORA), IBM ha sido oficialmente clasificada como "proveedor crítico de servicios de TI de terceros".

Esta designación conlleva implicaciones prácticas muy concretas. Significa que las actividades de IBM relacionadas con servicios prestados a entidades bancarias y aseguradoras quedarán bajo supervisión directa de los reguladores europeos. Lejos de ser una carga burocrática, este movimiento pone de manifiesto la profundidad con la que la infraestructura de IBM está integrada en el funcionamiento del sistema financiero europeo. La empresa ha declarado su compromiso de colaborar estrechamente con las autoridades y de mantener sus fuertes inversiones en ciberseguridad y gobierno corporativo.

El impulso analítico: Erste Group recomienda comprar

En el ámbito bursátil, la acción de IBM cerró el viernes con una subida del 1,77%, situándose en 307,99 dólares. Este avance tuvo su catalizador principal en un informe de los analistas de Erste Group, que revisaron al alza su valoración del título, pasando de "Mantener" a "Comprar".

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Los expertos fundamentan su optimismo en las últimas previsiones proporcionadas por la dirección de IBM. La compañía ha elevado su previsión de crecimiento de ingresos para 2025, que ahora supera el 5%. Un dato aún más relevante es la proyección de generación de flujo de caja libre, que se espera alcance aproximadamente los 14.000 millones de dólares, una cifra notablemente superior a los 12.470 millones logrados recientemente. Para Erste Group, estas cifras son la prueba tangible de que la estrategia de IBM, centrada en la nube híbrida y la inteligencia artificial, está dando resultados.

Dentro de este panorama, el segmento de software, impulsado especialmente por Red Hat, se anticipa que crezca con más fuerza en 2026 que en el ejercicio actual. Los analistas consideran que, sobre esta base, la cotización podría tener potencial para aproximarse de nuevo a su máximo anual de 324,90 dólares.

La valoración, en el punto de mira

Con una revalorización cercana al 40% desde enero, IBM se sitúa entre los valores tecnológicos consolidados con mejor desempeño en el año. Su cotización se encuentra muy cerca de sus máximos anuales, pero también se negocia a un múltiplo de más de 36 veces sus beneficios, una ratio que genera debate entre los inversores.

La cuestión fundamental es si un crecimiento de ingresos del 5% y un flujo de caja de 14.000 millones de dólares justifican de manera sostenible dicha valoración. Mientras Erste Group responde afirmativamente, los escépticos señalan precisamente la elevación de los múltiplos. La evolución en los próximos días, y si el nivel de los 310 dólares actúa como soporte o como resistencia, podría ofrecer pistas sobre la dirección que toma el consenso del mercado.

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